Aquellos aficionados a la decoración sabrán que, hoy día, hay muebles de casi todos los materiales. No sería de extrañar encontrarse, por ejemplo, con una estantería de cartón o con un taburete tallado en piedra. Por eso, os queremos mostrar ahora una tendencia que puede agradar a aquellos que adoran el diseño de vanguardia y que rompe con la idea del típico mueble de madera.
Hablamos de una decoración de espacios basada en mobiliario de acero inoxidable. Aunque es algo muy visto últimamente en cocinas, es un estilo fácilmente aplicable a otros lugares de la casa como puede ser el salón principal o, por qué no, a una oficina.
Como decimos, es muy frecuente ver cocinas con todos los electrodomésticos de acero e, incluso, con más elementos como pueden ser la campana, la mesa o la encimera. Este último elemento que nombramos, la encimera, es frecuente verlo en acero en el caso de cocineros profesionales por motivos que van más allá del diseño. Y es que, no podemos olvidar que una de las ventajas de este material es su fácil limpieza.
En cuanto a la estética del metal, hay que decir que aportará un aire moderno al espacio y, al mismo tiempo, un toque elegante y una sensación de orden.
En el caso del salón o del cuarto de baño, el acero aportará esas mismas sensaciones. Eso sí, especialmente en el caso de salones podremos jugar con la decoración y crear espacios más interesantes. No es necesario que el ambiente esté sobrecargado de elementos metálicos, ya que eso aportaría demasiada frialdad y un aire futurista que quizá no estamos buscando.
Se trata, básicamente, de saber combinar el tono gris luminoso con otros colores y materiales. Por ejemplo, podríamos tener en nuestro salón una mesa y una estantería metálica y unos cuantos marcos de fotos que también estén fabricados en este material. Su color resaltará mucho y tenderemos a agrupar visualmente todos los elementos de la habitación que tengan ese acabado plateado.
También podríamos combinar estos objetos y muebles con una pared lisa en colores como el blanco o el granate. Otra idea sería colocar una mesa de centro en las que haya encima unas bolas metálicas decorativas que vayan a juego con el resto de elementos de acero inoxidable.
En cualquiera de estos casos la elegancia está asegurada.
